El traje es la prenda más utilizada en la actualidad para ceremonia siendo la más informal de todas, pero no por ello menos elegante y muy agradecida en cuanto a modelos y posibilidades en multitud de combinaciones. Siendo una indumentaria elegante y versátil con el paso del tiempo ha ido sufriendo profundos cambios en cuanto a líneas y tendencias de moda con más o menos acierto, aunque desgraciadamente en muchos casos ha sido severamente castigado el traje con tejidos y combinaciones espantosas.

Podría estar hablando del traje largo y tendido, pero me limitare simplemente a puntualizar ciertos detalles para la correcta elección de nuestro traje. En primer lugar tendremos que elegir entre traje a medida o producción, que en mi modesta opinión no hay dudas, a medida.

• Traje de producción: es el traje ya confeccionado que podemos encontrar en la mayoría de establecimientos de prendas para caballero, pero que por muchos que encontremos será complicado acertar con el corte, el tejido y el color deseado, sin entrar a valorar la calidad de los acabados y más importante, los posibles arreglos que se tengan que hacer después. Por lo que el consejo que puedo ofrecer en este caso, es el que visiten un buen establecimiento con una larga trayectoria profesional en el sector y de su confianza para evitar posibles sorpresas.

Hoy en día hay buenos trajes de producción en el mercado de firmas de gran prestigio, pero si valoramos el coste de estos trajes quizás nos interese más decantarnos por un traje a medida que se confeccionara nuestro gusto y posiblemente a un precio similar.

Trajes Julian Adrados de producción

• El traje a medida: será a mi manera de entender la elección más acertada para una ceremonia y una experiencia muy gratificante ya que será participe del modelo, el corte, el tejido, los acabados …y se convertirá en una pieza única elaborada para el cliente en un día tan especial.

Un buen traje a medida sea artesanal o de acabado industrial será ceñido por fuera pero amplio por dentro, que oculta los defectos y resalta las virtudes, es como una segunda piel que te hace olvidar que estas llevando un traje, siempre al gusto del cliente y con costuras suficientes para poder retocar si fuese preciso.

Me gustaría diferenciar entre un traje a medida y un traje de medida industrial. El traje a medida está realizado enteramente a mano por un sastre, que además de unas manos muy expertas, requiere aproximadamente 50 horas de trabajo en costura, más el tiempo en pruebas y ajustes, de ahí su elevado precio aunque razonable teniendo en cuenta el tiempo y experiencia que se emplea.

Hoy en día son muy pocos los sastres que lo realizan todo a mano y quizás las líneas tienden en su mayoría hacía un corte clásico. La medida industrial en su mayoría se limita a adaptar un patrón estándar rectificando medidas sin opción a elegir acabados, entretelas, costuras, modelos, etc.